Dimos verguenza al mundo después del papelón que fue la final de la Copa Libertadores entre Boca y River.
Hoy, unos meses después, pasó lo de siempre. El micro del Xeneize recibió impactos de piedras.
En TyC Sports, el conductor del automovil explicó:“Fue algo rápido porque teníamos a la policía y no pasó nada, no se rompió ningún vidrio. Está todo bien”.
Justo en una semana donde se comunicó que Boca contratará un micro brindado para hacer sus viajes.
Una triste noticia. Una más en un fútbol que no mejora nunca. El nuestro. El que estamos orgullosos, pero damos lástima.