Granada y Barcelona se enfrentaron en un apasionante juego en los cuartos de final de la Copa del Rey, el cual necesitó de una prórroga para definirse ya que en los 90 minutos el encuentro finalizó 2-2.
Kenedy y Roberto Soldado le dieron la ventaja parcial a los locales, que hasta los 88 minutos la mantuvieron y soñaban con eliminar al todopoderoso equipo culé y meterse en las semifinales del torneo.
En una ráfaga, entre los minutos 88 y 92, Barcelona llegó al empate con los goles de Jordi Alba y Antoine Griezmann, quienes en dos combinaciones lograron la igualdad cuando no faltaba nada para terminar el juego.
Sin embargo, el Granada tuvo una última jugada para lograr la victoria, eliminar a los balugranas y celebrar una de las victorias más importantes de toda la historia, pero lamentablemente no entró.
El protagonista de la opción fue Luis Suárez, el colombiano, quien ganó la pelota y se fue en contragolpe absolutamente solo, pero ni siquiera pudo rematar al arco, sino que la envió completamente afuera de portería. Finalmente, en el tiempo extra, Barcelona ganó 5-3.