El Fútbol Club Barcelona nunca imaginó que la goleada sufrida ante el Bayern Munich por Champions League sería un mimo al lado de lo que le llegaría después.

El pasado lunes, Lionel Messi le comunicó al club que lo formó que no quiere seguir siendo parte de él.

Desde aquel día, los dirigentes -encabezados por Josep Bartomeu- están haciendo lo imposible para evitar la partida del 10.

Si bien parece imposible, el presidente de la institución conserva la esperanza de convencer al entorno del jugador.

Según informaMundo Deportivo,el miércoles habrá una reunión entre el mandatario y Jorge Messi, padre y representante del futbolista.

De todas formas, las intenciones de ambas partes parecen ser bien distintas: desde el club ofrecerán una renovación que a estas alturas parece imposible. Y desde el lado del argentino no buscarán otra cosa que una “salida amistosa” tras tantos años siendo emblema de la ciudad.

Leono asistió a los testeos exigidos por el club y todo parece indicar que tampoco se presentará mañana a entrenar. ¿Qué pasará?