España recibió a Inglaterra por la tercera fecha del grupo 4 de la primer división de la Liga de las Naciones de la UEFA. Sí, en la previa prometía mucho. Y una vez terminado el partido, podemos decir que superó lo que todos esperábamos.

Si no lo pudiste ver porque estabas trabajando, estudiando, o lo que sea, acá te contamos cómo fue. Porque sin duda, quedará como los mejores encuentros del año.

Pasa que en el primer tiempo los visitantes pasaron por encima al equipo de Luis Enrique. Lo pisotearon. 3-0 en menos de 40 minutos. Una ráfaga de fútbol, rapidez, agilidad.

Harry Kane, sin su toque goleador pero como la principal referencia de ataque con asistencias de lujo para sus compañeros. En los pies de Sterling x2 y Marcus Rashford, era todo felicidad para los de Southgate.

Pero el equipo local hizo el click y en el segundo tiempo salió como una topadora para revertir la situación. Ataque, ataque, ataque. Y llegó Paco Alcácer, que parece no poder jugar un solo partido sin convertir un gol. Una bestia del área.

Su cabezazo parecía despertar la llama de la remontada. Y al instante, la gran polémica del encuentro. El arquero Pickford perdió el balón al lado del arco intentando amagar al jugador español que lo presionaba.

Perdió la pelota y buscando remediar su error, lo agarró y tironeó. Logró que sea córner, sí, pero con un penal más grande que una casa de por medio. Nada. El árbitro no consideró que sea falta y hizo que el juego continúe.

Eso, sin duda, sacó de partido a una España que siguió intentando pero con menos intensidad, golpeado. Sergio Ramos decoró el resultado con un cabezazo en el último suspiro, como nos tiene acostumbrados.

Fue 3-1 para un partido lleno de emociones, de los mejores de este 2018 y que si no viste, tenesque buscar la repetición.