Un poco de tranquilidad para Chelsea. Es que no ganaba desde el 11 de marzo y cortó su mala racha con un buen triunfo en casa de Bournemouth por 3-1 por los goles de Conor Gallagher, Benoit Badiashile y João Félix. El uruguayo Matías Viña había empatado transitoriamente para el conjunto local.
Se terminó la racha de partidos sin ganar para los Blues, ya no que lo lograban un triunfo desde el 11 de marzo (ante Leicester) cuando todavía los dirígia Graham Potter. Por lo tanto, es el primer éxito de Frank Lampard desde su regreso al banquillo en el cargo de interino. Además, para el conjunto londinense se termina la pesadilla del descenso, como se llegó a comentar en los últimos días.
Todo había empezado bien para los de Stamford Bridge, ya que se pusieron en ventaja con un gol de cabeza de Conor Gallagher tras un buen centro de N’Golo Kanté, que poco a poco está recuperando la buena forma que se le conocía tras su última lesión.
Pero Chelsea siempre encuentra alguna forma de complicarse en los partidos. En esta ocasión, Bournemouth logró empatar con un golazo del uruguayo Matías Viña. Tras una buena conexión de pases, el ex lateral de Roma definió de derecha para terminar una enorme jugada y decretar el empate.
Los Cherries emparejaban el pleito de buena manera y aprovechando ciertas desatenciones de los Blues a espaldas de los mediocampistas. Los de Lampard trataron de dominar el balón, pero las jugadas de peligro sólo llegaban a través de la pelota parada.
En la segunda parte, el partido fue peleado y Bournemouth tuvo chances para ponerse en ventaja, pero se encontraron siempre con un buen Kepa, que sostuvo el empate. Y en los minutos finales, Chelsea se encontró con el triunfo. Primero, Badiashile marcó luego de un buen centro de Ziyech tras una pelota parada para el 2-1.
Luego, pocos minutos después, una enorme jugada individual de Sterling de afuera hacia adentro y dejando a rivales en el camino terminó con la buena definición de João Félix para el 3-1. El portugués marcó su tercer gol por Premier League.
Así, Chelsea se quedó con un triunfo en el que supo contener a Bournemouth en sus mejores tramos y aprovechando el buen juego aéreo. Tranquilidad por Stamford Bridge por unos días de cara al final de temporada. Los de Gary O’Neil, en tanto, siguen un poco alejados de la zona de descenso, pero desperdiciaron una buena chance para asegurar la permanencia en Premier.