Roman Abramovich y Chelsea se preparan para un huracán nunca antes visto en Stamford Bridge. El Gobierno británico ha dictado sentencias que congelan los activos del multimillonario ruso en Londres, así como la venta de un club que de momento no podrá realizar fichajes, vender entradas o ni siquiera camisetas.

The Sun desvela que finalmente y tras varias semanas de estudio por parte del Gobierno del Reino Unido alrededor de la relación de Abramovich con Vladimir Putin, el propietario del Chelsea ha sido finalmente sancionado con la congelación de sus activos en Reino Unido, donde por supuesto se encuentra un Chelsea que sufrirá consecuencias en relación a la guerra que azota el este de Europa.

Los informes han dejado en claro que el club del oeste de la capital ingles no podrá ser vendido hasta nueva orden, pero no se quedan ahí los problemas para un Roman Abramovich que recordemos ya tenía ofertas sobre la mesa y que incluso había delegado sus funciones a la junta de un Chelsea que se prepara para un final de temporada lleno de problemas.

Sin ventas, fichajes, renovaciones o entradas

Los Blues podrán seguir compitiendo de manera oficial hasta que se dicten nuevas medidas, pero poco más de eso. No podrán incorporar jugadores, renovar los contratos de sus empleados o si quiera realizar operaciones económicas relacionadas con el merchandising como la venta de entradas o camisetas del club.

Roman Abramovich en Stamford Bridge: Getty

Chelsea ha sido congelado por las autoridades británicas, quienes han dictado su primera medida contra los oligarcas rusos presentes en Reino Unido y con una relación directa con Vladimir Putin. La venta del club queda paralizada y solo podrán asistir a Stamford Bridge quienes cuenten con un abono pagado para el resto de la temporada. El vigente campeón de Europa empieza una dura era donde habrá que ver por cuanto tiempo es viable su situación a nivel económico.