Cuando todos pensábamos que el Consejo de Fútbol de Boca ya había aprobado todos los exámenes de inutilidad con los casos de Nicolás Valentini, Valentín Barco y Agustín Rossi, entre otros, llega este papelón: se olvidó de enviarle la lista de refuerzos a la Conmebol.
Román, se recibieron de inútiles, jugaron con la plata de Boca, gastaron 10 palos verdes del club, no de su bolsillo, y se olvidaron de avisarle a la Conmebol que tenían cuatro refuerzos. Mi hijo juega baby fútbol en el Estrella de Florida, un club de barrio, y ahí nunca se olvidan de un fichaje de un pibe, son mas serios que Boca.
Dicho esto, ya sabemos que en el Consejo de Boca son inútiles. Y esto no es una agresión, es una descripción, porque inútil es alguien que no es útil. Si vos no mandás una lista de refuerzos a tiempo, sos inútil.
Por otro lado, la Conmebol alguna vez podría ayudar a Boca, como tantas veces hizo con River. Podría hacer la vista gruesa y darles el OK para que las incorporaciones puedan jugar y darle una manito al Xeneize.
Dicho esto, éste era el momento para que Boca de el golpe del mercado de pases, gaste 15 millones de dólares y compre jugadores como Fausto Vera y Thiago Almada para que realmente se arme un equipo para ganar la Copa Sudamericana, jugar la Libertadores del año que viene y competir en el Mundial de Clubes 2025.
Román, ¿para qué seguís jugando al cartonero si tenés 35 millones de dólares asegurados del Mundial de Clubes?