La relación entre Nahuel Molina yBocano fue la mejor. Después de haberlo cedido en clubes como Defensa y Justicia (2018) y Rosario Central (2019), el defensor volvió al club en 2020 con la intención de jugar en Primera. Sin embargo, para que pueda permanecer en el plantel profesional, el lateral debía renovar su vínculo. Fue allí cuando comenzaron los problemas: después de varias idas y vueltas con el Consejo de Fútbol, finalmente el jugador se marchó libre por falta de acuerdo entre las partes.

Molina pasó semanas entrenándose en soledad mientras se consumía su contrato en el Xeneize y, al siguiente mercado, dio el salto a Europa gracias al Udinese, institución donde mostró su mejor versión en el Viejo Continente. Su llegada al Atlético Madrid llegó de la mano de su explosión con la Selección Argentina, para luego alzar la Copa del Mundo en Qatar 2022.

Hoy, con el trofeo más preciado en su vitrina, el lateral disfruta de su presente en España yNadie Dice Nada, programa de Luzu TV, fue hasta allí para hablar con él sobre todo lo que le ocurrió en los últimos años como profesional. No obstante, las orejas se pararon cuando al defensor le preguntaron por el club de que es hincha.

Molina, sin ningún tipo de rodeos, confirmó lo que su propio padre dijo meses atrás.“Yo hablo por mí: soy de Talleres de toda la vida”, confesó el jugador de la Albiceleste. Luego se acordó del Xeneize: “Le tengo un enorme cariño a Boca porque estuve ocho años de mi vida ahí metido”.

Tras escuchar al lateral, atrás quedan las versiones -como la de Flavio Azzaro- que indicaban un presunto fanatismo de Molina por River, pese a haber hecho inferiores y, por supuesto, su debut en el club de La Ribera. Mientras tanto, los hinchas de la “T” deliran con las declaraciones del actual futbolista del Atlético Madrid.