Ya es un hecho que Nahuel Molina Lucero es el nuevo refuerzo del Atlético Madrid del Cholo Simeone. Si bien solo falta la oficialización de parte del club colchonero, su arribo a la institución madrileña es algo confirmado en una operación que se dio a cambio de 15 millones de euros y el pase de Nehuén Pérez al Udinese, dueño anterior de su pase siendo este un club al que arribó libre luego de su salida de Boca.
Es que justamente en el Xeneize nunca tuvieron en consideración su rendimiento, ya que desde su debut en 2016 fue constantemente marginado por los distintos entrenadores que pasaron por el club durante su estadía. En lo que fue el año de su estreno como profesional solo disputó 9 partidos, donde posteriormente fue enviado a la Reserva y a Defensa y Justicia a préstamo, mientras que en la Ribera priorizaron a futbolistas de mayor trayectoria como Gino Peruzzi y Leonardo Jara, además de la llegada de Julio Buffarini en el 2018, mismo año en el que se concretó su cesión al Halcón de Varela.
Una temporada más tarde, Molina regresó de Defensa y teniendo competencia con el propio Buffarini, además del juvenil Marcelo Weigandt y el recién arribado Kevin Mac Allister. Por eso, Gustavo Alfaro lo probó como atacante y volante por la derecha, aunque finalmente tampoco fue tenido en cuenta y fue cedido a Rosario Central, donde se convirtió en uno de los mejores laterales del fútbol argentino.
A su regreso del Canalla, el futbolista debía arreglar su continuidad con Boca ya que vencía su contrato, pero entre Molina y el club no se pusieron de acuerdo y se marchó libre cuando tenía para competir el puesto con Buffarini, Jara y Weigandt. De esa forma, emigró del Xeneize con el pase en su poder y recaló en el Udinese, donde sus buenas actuaciones lo llevaron a la Selección Argentina y posteriormente, al Atlético Madrid.
A cuatro meses del Mundial de Qatar, Nahuel Molina tiene su lugar asegurado en la Scaloneta salvo alguna catástrofe y se sumará al equipo del Cholo Simeone para competir por LaLiga y por la Champions League. Boca, mientras tanto, se lamentará haber derrochado un talento de élite de esa manera.