"El hincha de Boca está loco", dijo muchísimas veces Juan Román Riquelme. Y cada vez llegan más pruebas de eso. Juan José Coronell es cordobés y fanático del Xeneize. Como periodista, sigue al club desde hace una década en medios partidarios. Pero su amor por los colores le pide más y siempre está dispuesto a todo para demostrarlo.
Esta vez, decidió llevar al altar el sentimiento que tiene por Boca. Sus amigos Florencia y Ale se casaron el sábado 11 de diciembre y organizaron una fiesta marcada por el fanatismo de ambos por el club: desde las fotos en la previa hasta las invitaciones con un pin de regalo y la posibilidad de celebrar el Día del Hincha después de la medianoche.
"A las doce en punto entramos con banderas al salón", le contó Juan José a Bolavip, explicando la gran importancia que tuvo Boca en el casamiento. La algarabía por la unión nupcial combinada con el Día del Hincha lo motivó a tomar una decisión: casarse él también, pero con Boca. "Era un casamiento extremedamente bostero y yo tenía que estar a la altura de las circunstancias", sostuvo.
Así fue como reunió banderas y le pidió ayuda a dos amigos: el que ofició la ceremonia y el testigo. "En contexto de un casamiento, le voy a preguntar: ¿quiere recibir a Boca, prometiendo serle fiel en la prosperidad y en la adversidad, en las buenas y en las malas mucho más, y así amarlo y defenderlo como lo ha hecho hasta ahora todos los días de su vida?", fue la pregunta de rigor. "Sí, quiero", respondió Juanjo. Y el remate del oficiante fue: "Puede besar a la bandera".
"Le tengo que agradecer a Ale que sea tan bostero y a Boca haberme permitido conocer a alguien que se transformó en amigo. Porque lo conocí gracias a Boca...", fueron las palabras de Juan José para su amigo, quien se casó con Florencia a puro azul y oro. "El día que me case no quiero menos de lo que viví este fin de semana", aseguró el hincha que está unido para siempre con Boca.
