No quedan dudas que Luca Langoni es de los futbolistas más determinantes de Boca en el último tiempo. Gracias a su facilidad para convertir goles en escasos remates al arco, el juvenil oriundo de Laferrere fue clave para que el Xeneize se consagre campeón de la Liga Profesional pasada jugando como acompañante del delantero de referencia.
Sin embargo, este 2023 el entrenador Hugo Ibarra lo desplazó de su lugar de cercanía con el área rival para que ese puesto lo ocupe Sebastián Villa y Langoni se acomodó en el puesto de volante por derecha, donde se lo nota con menor protagonismo y por ende, se sumó a la merma del rendimiento de todo el plantel en este mal momento que atraviesa Boca en donde el DT no le encuentra la vuelta al equipo.
De hecho, cuando Langoni jugó en la posición en la que más cómodo se siente, fue nuevamente clave como contra Talleres y Vélez, partidos en donde convirtió sus dos tantos de la temporada.
Luego de la nueva derrota de Boca ante Instituto en donde el equipo disputó de sus peores encuentros del año y del ciclo de Hugo Ibarra, el juvenil delantero mostró toda su bronca con un desconsolador gesto que lo dijo todo. Tapándose la cara con la camiseta, respirando hondo y sacando la lengua por el enojo, Langoni se desahogó del mal momento apenas Jorge Baliño pitó el final del partido.
A nivel rendimiento, el surgido en inferiores es de los que menos responsabilidad tiene de lo que pasa dentro de la cancha en el equipo de Hugo Ibarra. Y su cara de angustia total al momento de darse la derrota es un claro símbolo de eso. Lógicamente, los hinchas le hicieron sentir cariño y empatizaron con él, a sabiendas que su baja en importancia se debe a una cuestión táctica.