En Santiago del Estero, para cerrar la primera parte de la fecha 17 de la Liga Profesional, Vélez visitó a Central Córdoba en el estadio Madre de Ciudades y le ganó 2-1. Con emociones para ambos lados, nos dejaron un partidazo.

A lo largo de los primeros 10 minutos de juego, el partido fue muy trabado en la mitad del campo y a ambos equipos les costó salir jugando desde abajo. En más de una ocasión debieron saltear líneas para poder llegar hacia el área rival, pero sin claridad.

Vélez, a los 13 minutos, tuvo la chance más clara. Después de una serie de rebotes, Agustín Bouzat remató al primer palo del arco defendido por César Rigamonti, pero el disparo le salió al cuerpo del ex Belgrano. Sin embargo, la respuesta de Central Córdoba no tardó en llegar: a los 20, Oscar Salomón trepó por el andarivel derecho y, cuando le quedó el espacio, remató de media distancia con un gran bombazo. Para la mala fortuna de los santiagueños, la pelota se fue muy cerca del palo.

Los dirigidos por Mauricio Pellegrino tomaron mejores decisiones a la hora de generar juego, pero le fue complicado poder finalizar las jugadas. Hasta que llegó Federico Mancuello, a los 29 minutos, y abrió el marcador. El Fortín, después de tres ataques consecutivos, pudo vascular la jugada de izquierda hacia derecha, donde Tomás Guidara envió un gran centro para que llegue el ex mediocampista de Independiente y deje sin nada que hacer a Rigamonti.

 

 

En un clima adverso por la derrota parcial, Alejandro Martínez tomó todos los riesgos posibles y llegó a la igualdad del juego a los 39 minutos de la primera etapa. Después de capturar la pelota en la mitad del campo y avanzar sin preocupaciones desde la derecha hacia el centro, antes de pisar la medialuna, sacó un zurdazo que se metió en la ratonera. 

 

 

Con el ingreso de Mateo Montenegro, el cuadro santiagueño tuvo mayor dinamismo a la hora de atacar, y pudo darle total libertad al autor del empate, Martínez. Y cuando Vélez la pasaba mal, a los 19 minutos del complemento, Federico Mancuello envió un gran centro hacia el punto del penal para que Juan Martín Lucero (recién había ingresado) rematara de cabeza y así volviera a poner arriba al Fortín.

 

 

Después de que el conjunto de Liniers aumentara el marcador, el partido cayó en una meseta de buen juego, pero Central Córdoba comenzó a tener mayor ímpetu a la hora de atacar. Sin muchas ideas, peloteó al arco defendido por Lucas Hoyos, quien se hizo inmenso y evitó la igualdad.

A los 36 de la segunda etapa, se produjo la gran polémica de la noche: Milton Giménez remató de volea y la pelota dio en la mano de Miguel Brizuela. Sin embargo, el árbitro Fernando Espinoza no sancionó penal, y por sus gestos indicó que era imposible que el defensor de Vélez no tuviera su brazo en la zona.

 

Sobre el final del encuentro, el Fortín tuvo dos chances más para liquidar el pleito, pero Thiago Almada hizo una jugada de más y no resolvió rápidamente. En la primera ocasión, remató muy flojo hacia las manos de Rigamonti, pero en la segunda se pasó con el centro y ninguno de sus compañeros pudo conectar el balón.

Con este triunfo, Vélez quedó tercero en la Liga Profesional, a 8 unidades del líder River, quien este jueves visitará a Talleres. Por su parte, Central Córdoba no pudo dejar de ser el colista de la tabla y agudizó su mal momento.