Este viernes, en Tucumán, River puso fin a una seguidilla de ocho victorias consecutivas en Liga Profesional. Pero las circunstancias bajo las que consiguió el empate 1-1 ante Atlético, tras encontrarse en desventaja en el marcador y jugar con un hombre menos desde los 23 minutos del primer tiempo, hizo que tal situación no sea para lamentar.
Cuando el local ya estaba ganando el encuentro por un gol deMateo Coronel, José Paradela protestó de manera airosa ante Rapallini por una pelota que entendió había salido sin que se cobrara, recibiendo la primera tarjeta amarilla. Desencajado, en la siguiente acción fue con el codo a disputar una pelota con Joaquín Pereyra, ganándose la segunda amarilla que derivó en su expulsión.
Pese a la desventaja en el marcador y en el número de futbolistas en cancha, River logró la igualdad gracias a un gol en contra del propio Pereyra, cuando faltaban 3 minutos para que se cumpliera el tiempo de juego reglamentario. Martín Demichelis valoró la actitud del equipo para ir a buscar algo que llevarse de Tucumán, pero también hizo referencia a la insólita expulsión de Paradela.
“José es un chico muy sensible desde lo emocional y creo que tuvo razón en el momento en que la pelota se había ido. Me pareció a mí que se fue. Entró en esos segundos de desequilibrio emocional que le llevaron a cometer el siguiente error en tan pocos segundos. Como yo digose gana, se empata y se aprende, seguro que después de lo ocurrido aprendió mucho”, dijo mostrándose comprensivo con su situación.
La expulsión de José Paradela llegó en un momento muy poco oportuno, no solo por el largo tramo de partido que a River le quedaba por disputar en Tucumán, sino porque lo dejó automáticamente sin chances de disputar el Superclásico ante Boca, el próximo 7 de mayo en el Monumental.