Debido a las manifestaciones en contra de las condenas a los líderes independentistas de Catalunya, el partido entre Barcelona y el Real Madrid en el Camp Nou fue postergado y tardaron varias semanas en establecer una nueva fehca.

Después de muchas idas y vueltas, decidieron que el miércoles 18 de diciembre se juegue el clásico. Un encuentro fundamental para definir quien de los dos terminará como único líder de La Liga.

Pero esta nueva fecha no podría evitar que haya incidentes. Una agrupación llamó a manifestarse y podrían generar disturbios en la previa al duelo más importante del mundo.

Tsunami Democratic conovocó a su gente al Camp Nou horas antes del partido. Pero no queda ahí, también insisten con el pedido de ingresar con pancartas políticas al estadio para que sus reclamos ganen visibilidad.

Esto pone en alerta a la Federación Española de Fútbol y a ambas delegaciones. El miedo principal es el daño a la integridad física de los jugadores y el temor de que se genera una gresta en las inmediaciones de la cancha.

Por ahora, no se analiza cambiar la fecha pero si se aumentará la presencia policial por la zona. La idea es evitar que se acerquen al perímetro y puede desarrollarse todo en total normalidad.