Como todos los jugadores, Lionel Messi tuvo unos días de licencia a las órdenes de Ronald Koeman para pasar Navidad junto a su familia.
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Por eso, aprovechó las jornadas para volver a la Argentina y a su ciudad natal: Rosario. No obstante, la sorpresa fue cuando el Barcelona comunicó que el Diez y capitán del equipo tendría un par de días más de descanso por una molestia en el tobillo.
Bajo esa misma línea, el argentino no fue convocado para el partido de este martes contra el Eibar, donde los azulgranas recibirán al rival de la Liga Española en el Camp Nou.
Horas antes del encuentro, Messi aterrizó en Barcelona después de seis días en Rosario como estaba previsto.
Con su familia procedentes de Argentina, el avión privado aterrizó en la ciudad española y rápidamente se dirigieron a Castelldefels.
Se espera que mañana ya vuelva a entrenar y el domingo esté disponible para visitar a Huesca.
