La situación en Indonesia no cesa y crecen las dudas en la FIFA. A menos de dos meses de la fecha que fijó la entidad en su calendario para la realización de la Copa Mundial Sub 20 masculina (del 20 de mayo al 11 de junio), grupos musulmanes que habitan en el país anfitrión se manifestaron en contra de la participación de Israel.
A pesar de que las autoridades nacionales ya expresaron que no se negarán a recibir a ninguna de las delegaciones representativas de los 24 clasificados al certamen, las protestas, principalmente en la capital Jakarta, son cada vez más multitudinarias. Encima, el gobernador de Bali, una de las islas que conforman a Indonesia y que posee una de las sedes, solicitó que vetaran a Israel por su apoyo diplomático a Palestina.
Por tal motivo, la FIFA, en clara señal de que por estas horas reina el suspenso, postergó el sorteo que se iba a desenvolver este viernes 31 de marzo (aún no tiene reprogramación). Y al ver que la organización está contrarreloj, la Asociación del Fútbol Argentino, por segunda vez, presentó su candidatura para albergar la Copa Mundial Sub 20.
Pero claro, no todo es tan fácil. Porque el combinado albiceleste de la categoría que comandaba Javier Mascherano, fue eliminado en la primera fase del Campeonato Sudamericano que se llevó a cabo en enero en Colombia (de hecho, por tal decepción, el Jefecito decidió dejar su cargo al frente del equipo juvenil). Ahí radica el interés, en tanto y en cuanto, FIFA, por el conflicto interno, le retire el cupo que le otorgó a Indonesia como anfitrión y, en su lugar, se lo entregue a Argentina.
En caso de que esta posibilidad se concrete, AFA ya tiene a las siete canchas en las que se jugaría el campeonato: el Estadio Antonio Vespucio Liberti de Buenos Aires, el Estadio Madre de Ciudades de Santiago del Estero, el Estadio Bicentenario de San Juan, El Estadio La Pedrera de San Luis, el Estadio Mario Alberto Kempes de Córdoba, el Estadio Malvinas Argentinas de Mendoza y el Estadio Diego Maradona de La Plata.
