Este domingo se vio una imagen escalofriante en el duelo entre Leeds y Liverpool en Elland Road por la Premier League. En la segunda mitad, Harvey Elliott salió lesionado con su tobillo visiblemente roto tras un choque con Pascal Struijk. El momento fue aterrador y Mohamed Salah, que estaba cerca de su compañero, pidió atención médica desesperadamente.
Elliott se iba de contraataque y el neerlandés lo barrió de trás, con tanta mala suerte que su tobillo izquierdo quedó anclado sobre el césped y quedó dislocado. Este lunes, el inglés anunció que la cirugía fue exitosa y agradeció todo el apoyo que está recibiendo por estas horas.
El medio 433 replicó en su cuenta de Instagram las palabras de Struijk, que estuvo conmocionado luego de la acción: "Harvey Elliott, mis pensamientos están contigo. Te deseo una rápida recuperación y espero verte pronto en el campo de vuelta. Pasó algo en el partido que nunca le desearía a nadie".
En un gesto para destacar, y sin resentimientos, Elliott aprovechó el posteo para quitarle responsabilidad al defensor: "No fue su culpa en absoluto. Tampoco era una tarjeta roja, sólo un maldito accidente, pero estas cosas pasas en el fútbol. Volveré más fuerte, 100%. Gracias por todo el apoyo".
Tras la fortuita acción, Struijk se retiró de la cancha expulsado y Elliott, en ambulancia. El partido ya iba 2-0 a favor de Liverpool con goles de Salah y Fabinho, pero los 30 minutos restantes se disputaron bajo un raro clima por lo acontecido. Sadio Mané, en el tiempo de adición, redondeó el 3-0 definitivo para los de Jurgen Klopp.
