Jude Bellingham es uno de los mejores centrocampista del mundo y suele dar que hablar por lo que hace adentro del campo, ya sea con Real Madrid o la Selección de Inglaterra. No obstante, ahora resaltó por sus declaraciones sobre la salud mental en el deporte como embajador de Laureus.

El futbolista británico con pasado en Birmingham y Borussia Dortmund habló a corazón abierto y contó su experiencia: “Todavía existe un estigma en torno a hablar de salud mental. Sé que ha habido momentos en los que me he sentido vulnerable, he dudado de mí mismo y he necesitado a alguien con quien hablar, pero, en cambio, he intentado mantener esa imagen de atleta macho de ‘no necesito a nadie’. La verdad es que sí lo necesito, como todo el mundo. Y te sentirás mucho mejor si hablas de tus sentimientos y emociones”.

Jude Bellingham, embajador de Laureus (@LaureusSport)

Las redes sociales: un arma de doble filo

Bellingham reveló que en sus inicios como jugador de Birmingham solía buscar su nombre en redes sociales para ver qué decía la gente sobre él. Sin embargo, con el tiempo aprendió que ni los buenos ni los malos comentarios debían afectar a la percepción que él tenía sobre sí mismo.

Además, la estrella de Real Madrid remarcó que las redes sociales ayudan al futbolista a tener un trato más cercano con sus fans, aunque remarca: “También hay un elemento negativo que ahora he decidido evitar, y sé que muchos otros atletas también lo han hecho. Ya hay suficiente negatividad y presión en el deporte profesional como para ir a buscarla. Ahora, cuando leo comentarios negativos, no me afectan, pero sigo prefiriendo no verlos.

Sobre esto, Jude también menciona: Por cada persona o personas que te quieren, hay otras que te desprecian por el equipo en el que juegas o por algo que has hecho. Ese odio puede ser muy duro para los deportistas. Y completa: “Todo el mundo tiene derecho a opinar sobre el deporte, pero debería haber límitesa las cosas horribles que se pueden decir”.

La confianza, un factor clave para Jude Bellingham

“Lo más importante es la confianza: cuando la tienes, sientes que puedes manejarla para siempre. Pero cuando no la tienes, puedes sentirte más bajo que bajo, como si tus pies no funcionaran, como si tu cuerpo no funcionara”, asegura Bellingham. Esto va de la mano con estar fuerte mentalmente y no dejar que factores externos -como opiniones negativas de terceros- influyan.