En una de las categorías donde México tenía mayor posibilidad de medalla por las expectativas puestas en la disciplina, no fue la mejor presentación la protagonizada por las representantes del país en Gimnasia Artística en estos Juegos Olímpicos.
El tridente mexicano femenil en la competencia no lo hizo mal, pero no fue suficiente para mantener viva la ilusión de alcanzar el podio en este deporte en París 2024, y se quedó con las manos vacías en las primeras horas del domingo.
Sin embargo, la prueba de barras dejó en el camino un momento que quedará en la historia. Tras las actuaciones de Ahtziri Sandoval y Alexa Moreno, la tercer integrante del equipo mexicano, Natalia Escalera, se atrevió a hacer el ejercicio ¡lesionada! incluso yendo contra la recomendación médica.
Luego de sufrir la rotura del ligamento plantar y con mucho dolor, pudo realizar la rutina por completo ante el asombro de los presentes y los espectadores del otro lado de la pantalla, levantando un gran aplauso de todo el complejo que asistió a la cita.
Al finalizar la prueba, Escalera no se pudo contener y rompió en llanto producto del dolor y también de la emoción de haber podido hacerlo pese a su condición física de ese momento, recibiendo la felicitación de sus asesores. Era tal el desconsuelo que debió ser ayudada para salir del desfile.
Como si fuera poco, incluso bajo esas limitaciones, obtuvo una mejor marca que sus compañeras: sumó 12.800 contra los 12.266 de Ahtziri Sandoval y los 12.633 de Alexa Moreno; finalizando en la quinta posición. No pudo ser la medalla pero sí deja una enseñanza y una prueba de autosuperación que fue halagada por todos.