Una vieja herida se volvió a abrir y el debate se instaló nuevamente. Algo se tiene que poder hacer, no puede ser que un excelente grappler, de primer nivel, luzca unos cuantos escalones por encima de un striker de élite. No suena justo para el espectáculo que una de las dos esquinas cuente con una ventaja tan amplia sobre la otra y que lo único capaz de terminar con esto sea el campanazo final.

Porque claro, los luchadores son muy atractivos y convincentes en sus movimientos, pero cuando entienden que ya ganaron la pelea deciden dejar todo tipo de riesgo a un lado y simplemente se dedican a asegurar el triunfo. El disparador de este tema, que se puede tomar como problemática es la contundente victoria de Islam Makhachev sobre Jack Della Maddalena en Nueva York.

El debate de siempre: ¿Espectáculo o contundencia?

El ruso subió al peso wélter para dominar una división y lo hizo con una facilidad digna de quien le quita un dulce a un niño. Fue maravillosamente llamativa la forma en la que redujo a su rival a las mínima expresión, haciendo parecer que podía acelerar y frenar cuando quería, como si quien estaba enfrente no tuviese ninguna posibilidad de modificar el curso de la historia.

Islam Makhachev aburrió con su pelea ante Jack Della Maddalena. (GETTY IMAGES)

Las artes marciales son mixtas, sí, pero en parte se hicieron conocidas alrededor del mundo por su brutalidad, su salvajismo y su capacidad de poner de a pie en un segundo a quienes estaban sentados esperando un momento explosivo. Algo de lo que pasó minutos antes con los nocauts de Saint-Denis sobre Dariush o el de Prates a Edwards.

Entonces se traza la pregunta que reúne a los que discute sobre este tema. Porque está claro que los grapplers no están muy interesados en dar un show vistoso, pero… ¿Deberían hacerlo? Podría llegar un punto en el que los espectadores se cansen de esto, porque siendo francos, si se sabe que algo así terminará sucediendo, una pelea estelar sin nada de atractivo, no muchos comprarían un boleto o un PPV.

El público paga esperando que prime el show. Esta cartelera de UFC 322 fue el ejemplo perfecto de lo que los aficionados quieren ver y lo que no. Las múltiples finalizaciones antes de la pelea estelar terminaron por compensar un final apagado, que generó ciertos abucheos. Al final del día, poco importa quien es el campeón, porque los luchadores pasan, pero la organización sigue junto con los aficionados que acompañan año tras año, los encargados de hacer que la rueda siga girando. No se debe subestimar el gusto del que pide algo más y los strikers deberán buscar la manera de contrarrestar a los grapplers, porque los amante de la lona y las sumisiones no tienen ninguna intención de modificar su estrategia...

En síntesis

  • Islam Makhachev ganó de forma contundente a Jack Della Maddalena en Nueva York.
  • La cartelera de UFC 322 incluyó nocauts de Saint-Denis y Carlos Prates.
  • El estilo de grappler de Islam Makhachev en la estelar generó abucheos.