El próximo 21 de agosto, en la T-Mobile Arena de Las Vegas, tendrá lugar el que posiblemente sea el mejor combate del año cuando Errol Spence exponga sus títulos mundiales de peso wélter de la Federación Internacional de Boxeo y el Consejo Mundial de Boxeo ante el legendario Manny Pacquiao.

Para el filipino será el regreso a los cuadriláteros después de dos años en los que, en su rol de Senador, decidió abocarse a la asistencia de los damnificados que dejó en su país la pandemia de coronavirus, siendo su última presentación la que lo coronó campeón mundial de peso wélter de la AMB en julio de 2019, cuando venció a Keith Thurman en fallo dividido.

Por el lado de Errol Spence, el pasado 5 de diciembre hizo su primera pelea desde el accidente automovilistico que puso en riesgo su vida, saliendo victorioso por decisión unánime sobre el excampeón mundial Danny García, en el AT&T Stadium de Arlington.

Si bien el campeón mundial de la FIB y el CMB ha manifestado en reiteradas ocasiones su admiración por Manny Pacquiao, también se ha atrevido a faltarle el respeto, deportivamente hablando, manifestando que será él quien se encaergue de ponerle fin a su carrera propinándole una derrota.

"Quiero retirarlo, pero lo respeto por tomar esta pelea y ser un verdadero peleador. Pudo haber elegido a Joe Blow o alguien, o un peleador de MMA solo para obtener un gran cheque de pago. En cambio, tomó el mayor desafío en la división", expresó en diálogo con Morning Kombat.