Con la lesión ocular que Errol Spence confirmó este martes, Manny Pacquiao pierde la oportunidad de aspirar a los dos títulos mundiales que este ostenta y también de demostrar que, con 42 años, puede derrotar a uno de los cinco mejores peleadores libra por libra de la actualidad para agigantar todavía más su legado.

Pero el hecho de que el reemplazo del campeón mundial de peso wélter de la FIB y el CMB para el próximo 21 de agosto en la T-Mobile Arena de Las Vegas sea el cubano Yordenis Ugas le dará a cambio al filipino la oportunidad de vengarse de la asociación Mundial de Boxeo por haberle quitado su cinturón de campeón.

Sucede que por la inactividad del Pac-Man, que ya no volvió a pelear desde que conquistó el título mundial Súper de peso wélter de la AMB venciendo a Keith Thruman en julio de 2019, el organismo decidió retirarle el privilegio. Tiempo después, Ugas fue ascendido como campeón titular.

"He tenido que lidiar con cambios de oponentes antes, pero nunca tan cerca de una pelea. Todavía nos quedan dos sesiones de sparring más y, aunque estoy preocupado, no estoy demasiado preocupado. Manny se adapta a cualquier situación. Se veía genial en el sparring el martes", expresó su entrenador Freddie Roach.

Y agregó: “Ugas sale a matar de inmediato. Le gusta ir a por el jonrón cuando lanza sus golpes. Preferiría ganar una pelea por nocaut que por puntos. Habrá muchos fuegos artificiales. El hecho de que Manny tuviera el título mundial que ganó al vencer a Keith Thurman entregado a Ugas sin ninguna advertencia o debido proceso le ha dado un gran incentivo para actuar el 21 de agosto. Creo que está realmente enojado".