Max Verstappen sigue causando sensación en los aficionados de la Fórmula 1, después de obtener el campeonato mundial en una de las más apasionantes definiciones en la historia de la máxima categoría del automovilismo. La escena final de Abu Dhabi donde le arrebata el título a Lewis Hamilton continúa dando la vuelta al mundo.

En la escudería Red Bull Racing es todo alegría: con su estrella, por fin consiguieron arrebatarle la corona de pilotos a Mercedes AMG Petronas; y por si fuera poco, encontraron en Sergio 'Checo' Pérez a un acompañante de fiar (y sino vean la gran defensa que le impuso al británico en Yas Marina), el cual los segurá acompañando durante las próxima temporada.

Volviendo a lo sucedido el pasado domingo, el neerlandés de 24 años habló de cómo fueron las horas posteriores a la obtención de su primer campeonato. Sin pelos en la lengua, reveló que en las celebraciones 'se pasó de copas', durmió hasta pasado el mediodía, y se despertó con cruda creyendo que tenía día libre, pero debía cumplir obligaciones.

"Me tomé una copa el domingo. O más de una. Me desperté el lunes a las 13:00 horas o así pensando que tenía el día libre. Pero no fue así. Tenía un 'filming day' (día publicitario). Tenía un gran dolor de cabeza. Necesitaba descansar. Aún tengo sueño. Intenté ser perfecto todo el año. Todo salió tras el título. El martes piloté muy bien. Igual todavía me dolía la cabeza", disparó.

Red Bull es su familia

Por su parte, Verstappen aclaró que desea quedarse por mucho tiempo más en el equipo energético: "Era el objetivo desde que llegué. Fue muy emocionante verlos. Intenté disfrutar el momento. Estuvo muy bien. Así lo siento. Lo dije en la radio, que quería estar 10-15 años. Ahí puedo ser yo mismo. No es sólo por el rendimiento, es que disfrutes haciéndolo".