Feyenoord fue un completo desastre en el Olímpico de Roma, donde fue goleado por la Lazio en el inicio de la fase de grupos de la UEFA Europa League. El equipo neerlandés dejó mucho que desear en su estreno a nivel continental, siendo este el primer tropiezo de la temporada luego de los buenos resultados conseguidos en la Eredivisie.
Los de Róterdam cayeron goleados por el marcador de 4-2, en un partido que estaba prácticamente resuelto antes de cumplirse la primera media hora. Pero en las crisis surgen las mejores oportunidades y eso lo entendió muy bien Santi Giménez, quien aprovechó esta situación para demostrar que merece más minutos.
Cuando ya no había nada que hacer y la diferencia era de cuatro goles, Arne Slot mandó a la cancha al Chaquito para debutar en competencias europeas. El delantero mexicano respondió a esa confianza de la mejor manera y con apenas cinco minutos en el campo, convitrió un golazo de penal con un potente remate de zurda.
Aun sin demasiados incentivos para mantener la intensidad del partido, Giménez no desperdició la oportunidad para dejar claro que va muy en serio por la titularidad. Y es que a los 89′ apareció de nueva cuenta el ex-Cruz Azul, esta vez para aprovechar un rebote dentro del área y empujar el balón al fondo de las redes.
El doblete representa una enorme importancia para el Bebote, quien tiene un excelente promedio en sus primeros meses con el Feyenoord: un gol cada 22 minutos. Al margen de las consideraciones que tácticas que pueda tener Slot sobre el mexicano, lo cierto es que su olfato goleador no está en discusión y eso vale oro en cualquier equipo.
