El documental The Last Dance expuso la criptonita de Michael Jordan en los primeros años de su carrera. Y es que, por más que lo intentó; los 'Bad Boys' de los Detroit Pistons eran muy fuertes, malos y físicos como para vencerlos, por lo que cayó derrotado en tres temporadas consecutivas.
Jordan trabajó incansablemente en su juego y su físico para poder vencer a su némesis finalmente en 1991 y, si bien le costó muchísimos trasnochos, Magic Johnson reveló en una entrevista con NBC Today que fueron la motivación que necesitaba para convertirse en el mejor jugador de la historia.
"Los Bulls continuaron tratando de ganarles a los Pistons e Isiah (Thomas) les negó la oportunidad muchas veces, pero eso los hizo el equipo ganador de campeonatos que fueron. Los Pistons les dieron muchos golpes bajos, puedo entender por qué Michael estaba tan molesto. Pero lo bueno de esto es que hicieron que Michael Jordan se convirtiera en el mejor de la historia. La razón por la cual es el mejor de todos los tiempos es porque tuvo que pasar por encima de los Pistons", declaró Johnson.
Aunque Michael se rehúse a admitirlo, Johnson tiene un buen punto en estas declaraciones. El talento ya estaba, la técnica ya estaba, pero los Pistons expusieron su falta de potencia física y básicamente lo obligaron a pasar horas en el gimnasio ganando músculo para soportar las palizas que le daban en el tabloncillo.
Los Bulls terminaron por ganar el primero de sus tres campeonatos consecutivos justo después de vencer a los Pistons en aquellos playoffs. Luego, Jordan se retiró solo para volver y reafirmar su posición como el más dominante de todos los tiempos y ganar otros tres campeonatos.
