Los Golden State Warriors llegaron sumamente golpeados a las Finales de la NBA, pero, aún así, lograron ponerse 3-2 ante los Toronto Raptors, y tenían la oportunidad de emparejar la serie en casa para forzar el séptimo en Canadá.
Sin embargo, Klay Thompson sufrió una terrible lesión que lo obligó a perderse gran parte del compromiso, y su equipo terminó cayendo 114-110 a manos de Kawhi Leonard para sellar el marcador definitivo de 4-2.
No obstante, el Splash Brother considera que las cosas no hubieran sido tan sencillas para los canadienses si él no se hubiera lesionado, y aseguró que, de mantenerse sano, hubieran ganado las Finales:
“En mi mente, sí, hubiéramos ganado si no me lesionaba. Pero esa es la naturaleza del deporte, ¿sabes? ¿qué hubiera pasado? ya no importa. En mi mente, creo que hubiéramos ganado, pero uno nunca sabe. Esa es la parte difícil que debes aceptar”, declaró Thompson.
Efectivamente, los Warriors necesitaron del tiro certero y la defensa asfixiante del escolta durante el último tramo del partido, y hubiera sido otra importante opción a la ofensiva además de Stephen Curry.
Ahora, con el partido ya en los libros de historia, Thompson deberá concentrarse únicamente en la recuperación de su ligamento anterior cruzado de la rodilla, para que los Warriors puedan soñar con la revancha.