El segundo gol de Suárez en le goleada por 4-1 sobre Espanyol derivó de una jugada de fantasía, en la que Iniesta y Messi apilaron rivales, uno detrás del otro.
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Barcelona cumplió con la lógica y goleó a Espanyol por 4-1 en el derbi catalán, disputado este domingo en el Camp Nou.
Un Luis Suárez encendido le alcanzó al conjunto culé para sumar tres puntos más en la Liga de España y no perderle pisada al líder, Real Madrid.
Messi es el mejor porque se supera día a día
Sin embargo, la fantasía al partido se la pusieron entre Andrés Iniesta y Lionel Messi, quienes fueron los grandes protagonistas del segundo gol del uruguayo, apilando rivales en una jugada que debió terminar en gol del argentino, pero el arquero Roberto Jiménez detuvo su remate y el Pistolero facturó en el rebote.
El show de la Pulga no terminó ahí, ya que un minuto más tarde volvió a romper con amagues en el área rival y asistió a Jordi Alba con un pie a pie para el 3-0.
Ya en tiempo cumplido, tiró una pared con Lucho y definió con toda la clase entre las piernas del arquero para sentenciar la goleada.
Dos fenómenos cara a cara:
