Los New England Patriots anunciaron recientemente que colocarían al receptor abierto Josh Gordon en la lista de lesionados, después de que agravara una lesión en su rodilla durante la Semana 5 y se perdiera el partido siguiente.

Si bien esto parecería un trámite de rutina, Gordon aparentemente ni siquiera estaba enterado de la situación, por lo que comentó una publicación en Instagram en donde se reportaba la noticia con la palabra “interesante”.

Pero lo realmente extraño de toda la situación es que, aparentemente, la condición física del ex de los Cleveland Browns es óptima y la intención del equipo no es conservarlo, por lo que lo conservarán apenas esté sano.

De esta forma, Gordon podría regresar al emparrillado esta misma temporada vistiendo el uniforme de otro equipo, pero lo que parece realmente extraño de la situación es la maniobra de Bill Belichick y compañía.

Tras traer a Mohamed Sanu desde los Atlanta Falcons, los Patriots podrían simplemente tratar de cambiar o cortar a Gordon sin necesidad de forzarlo a perderse más tiempo de acción. Ahora, se espera que despierte interés de varios equipos de la liga.

Ya Demaryius Thomas había criticado previamente la forma en la que los Patriots lo trataron, alegando que lo hicieron perder su tiempo. Ahora, parece que la historia se repite con Gordon. ¿Qué nos están ocultando?