Muchas veces una jugada puede cambiar el transcurso del encuentro, porque jugar con un hombre de más o de menos, puede cambiar indudablemente los planes previamente estipulados.
Pumas debió jugar un tiempo entero con 10 jugadores en el duelo ante Tigres y, como si fuera poco, con la premisa de remontar un 0-1. Todo producto de la misma jugada.
Luis Quintana derribó en el área a Enner Valencia cuando se acababa la primera etapa, lo que le costó la expulsión y, a la postre, el gol de penal por parte de Tigres. Sin embargo, Míchel González entiende que antes del penal había una falta que no sancionaron.
“Soy de los que defienden al VAR y sobre todo a los árbitros, pero parece que las banderas están en peligro de extinción. Tengo el derecho de reclamar lo que creo es una injusticia y creo que después de esa jugada, que era falta previa a favor nuestra, cambió el partido”, expresó el entrenador de los Universitarios en La Última Palabra.
En el segundo tiempo, los dirigidos por el Tuca Ferretti consolidarían el primer gol con un 3-0 final, donde la noche fue recordada por los goles de André-Pierre Gignac, el mundo a sus pies y no por la jugada en la que Míchel hizo hincapié.