Cuando apenas iban 19 minutos del primer tiempo, Nicolás Gabriel Sánchez abrió la cuenta de penal para Monterrey frente a Puebla en el Gigante de Acero, pero lo que llamó la atención no fue ello...
Es que, automáticamente, los jugadores de Rayados fueron a saludar y a abrazar a Diego Alonso como una fuerte muestra de respaldo en sus horas más difíciles en el cargo.
Tanto el autor del gol como sus compañeros apoyaron al estratega uruguayo, de quien se rumoreaba que podría haberse marchado del club en caso de perder nuevamente como local.
Encima, a los 39, otro argentino como Rogelio Gabriel Funes Mori estampó el 2-0 y llevó tranquilidad tanto a Alonso como a La Pandilla en general en busca de aparecer nuevamente en puestos de Liguilla luego de esta décima jornada del Apertura 2019.