La polémica por la continuidad del fútbol en Argentina no para un segundo. Cuando parecía un hecho de que se iba a suspender, el Presidente de la Nación declaró que no era necesario que parara.
Los jugadores pusieron el grito en el cielo y se reunieron los capitanes de cada club con Agremiados para dejar en claro su postura. Casi la totalidad de los futbolistas se niegan a continuar con el deporte, debido al aumento de número de infectados.
Uno de los ejemplos que ponen es lo que está suciendo en toda América Latina. Todas las ligas decidieron suspenderse por tiempo indeterminado y solo queda la de nuestro país.
Hasta hace unas horas, nos acompañaba Chile y Bolivia. Ambas federaciones decidieron suspender toda la actividad, dejando la Copa Superliga como la única en América del Sur.
En el continente en general nos acompaña la de Guatemla y ninguna más. Las otras que siguen en el mundo son las de: Rusia, Ucrania, Uzbekistán, Palestina, Bahréin, Nueva Zelanda, Liberia y Etiopía.
El argumento principal eran los pocos infectados, pero hay países que ni tienen y decidieron posponerlo igual. Todo indica que en la reunión del miércoles se decidirá parar el fútbol y nos uniremos.