Luego de la enorme polémica que se generó con el VAR en el partido entre Medellín y Nacional, muchos esperaron que la Comisión Disciplinaria de la Dimayor decidiera sancionarde oficio para castigara Álex Castro por los dos cabezazos que le propinó a dos jugadores del DIM. Ni lo uno ni lo otro.
Por esas dos agresiones de Castro, se levantó la mayor polémica del arbitraje colombiano en lo que va corrido de 2021. No solo el árbitro dejó pasar por alto los golpes del jugador, sino que el VAR tampoco pudo advertir las acciones porque, según se pudo conocer, la señal del videoarbitraje en ese momento “estaba caído”.
Por esa razón, muchos expertos aseguraron en el transcurso de la semana que la Dimayor tenía que actuar de oficio para sancionar al jugador. Sin embargo, no pasó absolutamente nada. En la última Resolución publicada por la Dimayor, el único castigo fue la multa económica por la amarilla que le mostraron por el primer cabezazo. La clara agresión a James Sánchez pasó por alto.