En el desembarco de Miguel Ángel Russo en Boca Juniors, Iván Marcone tenía todos los boletos comprados para ser una de las bajas del conjunto Xeneize.
Alrededor de siete millones de dólares era lo que pedía Boca para desprenderse del volante central, que incluso sonó con fuerza para retornar a Cruz Azul.
Sin embargo, el retiro inesperado de Daniele De Rossi generó un cambio absolutamente radical en torno a la importancia del hombre surgido de Arsenal de Sarandí.
El alejamiento del experimentado volante italiano le generó un hueco importante a Boca en la mitad de la cancha, por lo que Marcone ganó terreno.
Tras esta noticia, el jugador de 29 años de edad fue declarado intransferible por el conjunto argentino, puesto que ahora Russo lo considera titular.
Cabe destacar que, a principios del año 2019, Boca desembolsó nada menos que ocho millones de dólares para hacerse con la totalidad de la ficha de Marcone.
