Lucas Romero, afianzado ya en el Cruzeiro de Brasil, tendrá la oportunidad de volver a jugar en suelo argentino cuando su equipo visite el Monumental por los octavos de final de la Copa Libertadores.

Lejos de preocuparse por la magnitud del rival, el ex-Vélez se mostró entusiasmado con lo que le deparó el sorteo a su equipo.

“Me puso contento cuando tocó River. Es la posibilidad de jugar en Argentina y que mi familia me pueda ver”, expresó.

Romero, que alguna vez estuvo también en la órbita del Millonario, dijo no pensar que tendrá que enfrentarse al mejor equipo de Argentina. Pero no lo dijo de manera despectiva, sino todo lo contrario:“Lo que pienso es que voy a enfrentar al último campeón de América”, contó en diálogo conLa Oral Deportiva.

Y para dar por terminado el tema River, agregó:“Para ser campeón tenés que ganarle a todos. Si queremos ganar, tarde o temprano nos íbamos a cruzar”.