Lo que estaba sufriendo River en este segundo tiempo. Gimnasia de Mendoza desperdició un penal y, segundos después, uno de los ingresados se comió un mano a mano bárbaro.

Fue ahí cuando apareció la mano del Muñeco. Mandó a la cancha aRolheiser, quien remató al arco, Palacios la acomodó con la cabeza y hubo gol del elenco de Núñez.

Un tanto fundamental para que River acomode las cosas y ahora pueda jugar con mayor tranquilidad.

Gimnasia desperdició oportunidades que, si se quiere dar el batacazo, no se pueden olvidar.