El luge, el skeleton y el bobsleigh son tres de los deportes más vertiginosos de los Juegos Olímpicos de invierno. Acaso, junto con el esquí eslalon se trata de disciplinas en las que la velocidad y la concentración marcan el paso de los competidores. Adrenalina máxima, en verdad.
Lo cierto es que parecen similares, pero no lo son. En cada prueba, los atletas se lanzan a toda prisa por una estrecha pista de hielo. Lo que los une es la esencia. Los tres son deportes de trineo y, en Pekín 2022, se desarrollarán en el Centro Nacional de Deslizamiento de Yanqing, una pista de 1615 metros de largo, con un desnivel máximo del 18% y 16 curvas. Este Centro se ubica en la zona montañosa de Xiaohaituo en Yanqing, a 74 km al noroeste de Pekín y tiene una capacidad de 2.000 asientos y una capacidad para 8.000 espectadores de pie.
El luge comenzó como deporte en Suiza a finales del siglo XIX. Aunque fue Noruega donde se popularizó tras incluirlo en los Juegos de Invierno de 1955.
En Pekín 2022, competirán 106 deportistas divididos en cuatro pruebas (habrá 12 medallas en disputa), individual varonil y femenil, dobles varonil y relevo por equipos. El evento comenzará el 5 de febrero y terminará el 10 del mismo mes.
En la prueba, los atletas se lanzan por la pista de hielo en el trineo con los pies por delante y, una vez arriba, deben ir tumbados boca arriba. Comienzan sentados, impulsándose hacia delante con las manos para luego ir cambiando la distribución de su peso y los ángulos de descenso para minimizar los márgenes de tiempo en las curvas lo más rápido posible. Hacen todo esto, al tiempo que tratan de mantener la inercia y una velocidad que puede llegar a alcanzar entre 120 y 150 kilómetros por hora. Es el más rápido de los tres.
En skeleton, los atletas comienzan corriendo a pie durante unos 40 metros para tomar la mayor velocidad posible. Luego, se tumban boca abajo para lanzarse de cabeza por la pista de hielo a velocidades que superan los 130 km/h. Pero su génesis se remonta al siglo XIX. Tiempos en los que aparecieron los primeros prototipos de este tipo de trineo. Sin embargo, la primera vez que se usaron fue en 1905 durante una competición de invierno en Austria.
En Pekín 2022 habrá dos pruebas de skeleton, individual masculino y femenino (del 10 al 12 de febrero). Allí competirán 50 deportistas olímpicos que se repartirán en total seis medallas.
El bobsleigh, por su parte, es el deporte de deslizamiento con más tradición olímpica. Desde la creación de los Juegos Olímpicos de Invierno, en Chamonix 1924, estuvo presente en todas las ediciones menos una (Juegos Olímpicos de Squaw Valley 1960). En sí, el bobsleigh surgió como deporte a principios del siglo pasado como una atracción turística de la estación de Saint Moritz.
Los atletas adquieren velocidad corriendo durante unos 50 metros y se lanzan por la pista de hielo sentados en un trineo alto que se conduce con unas cuerdas que lleva dentro. El miembro de la tripulación que va colocado en la parte trasera puede usar los frenos para aminorar la velocidad durante el descenso, aunque no se usan mucho.
Tradicionalmente el bobsleigh es una competición por equipos en los Juegos Olímpicos de Invierno, con bobsleigh a dos masculino y femenino, y bobsleigh a cuatro masculino. Pero en Pekín 2022, por primera vez en la historia, se incluirá una prueba de monobob femenino (individual). En total, competirán 170 atletas (124 en categoría masculina y 46 en femenina), del 13 al 20 de febrero.