España vivía sus mejores momento en la Eurocopa. Con un fútbol agresivo y con la posesión de la pelota metió atrás a Croacia, que solo resistía mediante fuerza y trabajo en equipo. Todo cambió en el minuto 20, cuando un pase de Pedri hacía el arco de Unai Simón terminó con uno de los grandes errores del torneo.
El centrocampista del Barcelona le quitó la presión de encima con un balón hacía su portería de cara a evitar un robo por parte de Modric, Brozovic o Kovacic. Unai Simón empezó a perfilarse para recibir, pero la pelota iba con demasiada fuerza para ser controlada y terminó por rebotarle mal antes de impactar con su pie derecho. Para desgracia de todos los ibéricos, el balón se fue al fondo del arco.
Unai Simón fue consolado inmediatamente por sus compañeros, quienes como Azpilicueta quisieron levantar su ánimo luego de uno de los grandes errores de Euro. Luis Enrique se agarró la cabeza y tras algunos minutos en silencio, salió de su banquillo para animar por enésima vez a sus jugadores. Un
España venía de tener a su favor el error de Dubravka en Sevilla, donde el portero eslovaco mandó al fondo de su portería un centro desviado por sus centrales. Tras sus mejores minutos en la Eurocopa, La Roja tendrá que remar de nuevo contra viento y marea para seguir vivo.