Este jueves,Chelsearecibió alManchester Cityen Stamford Bridge sabiendo que podía darle una gran mano al Liverpool.

Los de Pep Guardiola visitaron a los de Frankie Lampard sabiendo que debían ganar sí o sí para retrasar por unos días la consagración de losReds.

Sin embargo, no estuvieron nada finos en la primera parte. Así quedó evidenciado cerca de la media hora de juego.

Tras un saque de esquina en ataque, Chelsea reventó largo el balón. Lo que hicieronBenjamin Mendy e İlkay Gündoğan fue de locos.

Gündogan se la dejó a Mendy, Mendy le abrió los brazos y se la dejó a él. Dudaron los dos, pero el que no dudó fueChristian Pulisic.

El estadounidense apareció a toda velocidad, siendo el único jugador del Chelsea cerca de la mitad de cancha, se fue sin marca y le ganó el mano a mano a Ederson.