En El Clásico, durante el primer tiempo, se dieron dos jugadas que fueron protestadas por todos los jugadores delReal Madrid.
Casi en un intervalo de un minuto. Primero, Ivan Rakitic agarró a Raphaël Varane en un córner ante las cámaras de la transmisión de la televisión oficial. Después, Clément Lenglet se encargó de atender en un dividida al mismo defensor francés, a quien le dejó marcado los tapones de su botín.
En las redes sociales, las jugadas fueron repetidas una y otra vez por los fanáticos merengues, que no entendían como el VAR no llamó al árbitro principal para revisar, por lo menos, alguna de las dos ocasiones dentro del área azulgrana.
Después del encuentro,Sergio Ramosfue el jugador del Real Madrid más tajante al hablar de la actuación del árbitro y cargó contras sus decisiones al no darle un penal a la Casa Blanca.
“Se ve bastante claro que son dos penaltis. Ya nos tocará a nosotros que, cuando hagamos un penalti, lo mismo no lo mira“, apuntó.
Por último, agregó: “Cuando no se gana no te puedes ir contento. Hoy se ha visto un Real Madrid muy serio, muy comprometido“.
En un partido sin goles, las dos ocasiones de penales darán que hablar durante la semana.