Este viernes comenzó a disputarse una nueva fecha de la máxima categoría del fútbol español. Lo hizo con un compromiso entre Athletic de Bilbao y Huesca.

Se trató de un partido que, en la previa, no generaba gran expectativa entre los fanáticos del deporte más hermoso del mundo teniendo en cuenta el presente de ambos elencos.

Es que los vascos, a diferencia de otras temporadas, no venían edificando una campaña satisfactoria en La Liga de España, por lo que necesitaban sumar sí o sí.

Por su parte, los visitantes están en la parte baja de la tabla de posiciones y con una lucha muy clara: no descender a la segunda división.

De todas maneras, el partido ofreció una curiosidades que dejó a todos los espectadores con la boca abierta. Y la misma no tuvo que ver con el juego.

Sucede que el árbitro del encuentro debió pararlo por unos instantes como consecuencia de algo insólito: se encontró un teléfono celular en el campo.