Gerard Piqué es muchomesque un jugador. Involucrado frecuentemente en cuestiones políticas por Catalunya, el central del Barcelona se convirtió en una voz referente en el movimiento que persigue la independencia de la comunidad autónoma.

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Sin embargo, parece que esta vez, su personalidad le jugó una mala pasada. Según el Espanyol, histórico rival delblaugrana, Piqué se refirió despectivamente al club como “Espanyol de Cornellá”.

La dirigencia delPericoconsidera que las declaraciones del jugador campeón del Mundo con España en 2010 “flirtean muy peligrosamente con actitudes xenófobas”. Además, en el mismo comunicado, informa que “Cornelláde Llobregat […]perteneceal Área Metropolitana de Barcelona y destacapor una de las dosciudades con más población de Catalunya”. También, aclara que “la mayor cantidad de las familias son de clase trabajadoray luchadora, con raíces familiares en toda España y en otros países, que son y serán siempre un ejemplo de integración y progreso y un orgullo”.

Cabe aclarar que el Espanyolmudó recientemente su sede a Cornellá, a 9 kilómetros de la capital, Barcelona. Con sus declaraciones, Piqué se “vengó” de los hinchas del eterno rival, quienes en 2014 habían entonado canciones en contra del central y su familia.

+ Así le gritaban a Piqué en 2014:

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