Siguen los escándalos en Francia, es que la Federación Francesa de Fútbol (FFF) no termina de salir de un problema para meterse en otro, y su presidente Noël Le Graët tiene mucho que ver en todo este lio que se armó en la FFF.

Es que apenas pasaron unos días desde que el directivo lanzó una dura crítica ante una leyenda del fútbol de Francia, el presidente de la FFF dijo que "no le hubiera atendido el teléfono a Zinedine Zidane", y esto desató una ola de críticas encabezadas por Kylian Mbappé, la gran figura de Francia.

Noel Le Graet (Getty)

Casi de inmediato de aquel suceso, el presidente de la Federación Francesa fue acusado de acoso sexual por la agente Sonia Souid, una de las más más influyentes en el fútbol femenino, por lo que la denuncia tiene mucho más peso.

En extractos de una entrevista con el canal BFM TV que se anticipa saldrá completa el lunes 16 de enero, la empresaria dijo que el dirigente "la veía como dos senos y un trasero", al recordar una reunión celebrada en 2014 en el apartamento del presidente e insistentes mensajes a nuevas reuniones por cuatro años.

 

"Yo tenía 28 años en ese momento. Él tenía 72 años. Debería tener ese respeto. Nunca me miró como un agente, sino como un caramelo para masticar. Para hablar vulgarmente, me vio como dos pechos y un culo" dijo la empresaria en la entrevista, donde contó además como se dio el acercamiento. 

Ella le envió un correo electrónico para poder desarrollar el fútbol femenino, ese correo fue respondido y se concretó una primera reunión en un restaurante en París, luego se dieron varios intercambios de reuniones y llamadas, incluso una en 2014 en el departamento del dirigente. La empresaria asegura que él la invitó, explicándole que era más cómodo y confidencial. Ella decidió ir por la oportunidad de intercambiar ideas sobre el fútbol femenino, según explica.

Sonia Souid (Getty)

Sin embargo, la euforia por la reunión se disipó rápido, Suid contó que se sorprendió al llegar al ver dos copas de champán llenas. "Sospechosa", porque se suponía que debía llegar también la secretaria general de la FFF, Brigitte Henriques, pero Le Graët le informó que "no vendría". 

En ese momento, según el testimonio de la agente, el presidente habría dicho que "si tuvieran una relación más cercana, él podría materializar sus planes". Fue entonces cuando encontró una excusa para irse, convencida de que el gerente estaba tratando de arrastrarla a la cama.

 

"Soy una de las pocas agentes mujeres, trato de probarme a mí misma. Y a pesar de eso, me di cuenta de que, cada hora, lo único que le interesaba eran mis dos pechos y mi culo. Esto es violencia, me dolió. Es humillante", dijo Suid en el adelanto de una entrevista que promete seguir encendiendo más a las internas en la Federación Francesa de Fútbol.