A los 34 años, Samir Nasri anunció este domingo que cuelga los botines como futbolista profesional. El exmediocampista francés deja atrás una impresionante carrera que decayó en los últimos años producto de una suspensión que no lo dejó ser el mismo en la cancha.
En 2017, mientras se desempeñaba como futbolista deAntalyaspor, en Turquía, Nasri fue suspendido por 18 meses por dopping positivo por un tratamiento intravenoso antireglamentario. “Fue una inyección de vitaminas porque estaba enfermo. Eso me detuvo“, explicó el exvolante al Jornal du Dimanche, via Sky Sports.
Y luego explicó que esa acción y sus consecuencias le cambiaronla forma de ver al fútbol: “Unincidente realmente me lastimó y cambió mi relación con el fútbol: mi suspensión. Lo encontré más que injusto porque no tomaba ninguna droga“.
Tras la suspensión, Manuel Pellegrini le dio una oportunidad en West Ham, pero el francés sufrió de lesiones recurrentes y nunca pudo volver a hacerse sólido en el equipo, en donde sólo jugó seis partidos. Anderletch, en la 2019-2020, fue su último paso como profesional, disputando ochoencuentros. La poca continuidad debido a las lesiones y el parate que significó la pandemia lo empujaron a tomar la decisión del retiro.
Nasri deja atrás una carrera con puntos realmente altos. Debutó en Olympique de Marsella y luego dio el salto a la Premier League, en donde consiguió destacarse primero en Arsenal y, después, en Manchester City. Con los Citizens se convirtió en campéon, con dos Premier League, dos Copas de la Liga y una Community Shield.