Chelsea quiere terminar la temporada sea como sea para poder hacer borrón y cuenta nueva. Sin embargo, el fantasma del descenso empieza a merodear sigilosamente por Stamford Bridge, luego de la reciente derrota ante Arsenal. Si bien debería ocurrir una catástrofe para que esto ocurra, lo cierto es que no están tan lejos con la zona baja como uno puede pensar.
Los Blues urgen de resultados a fin de poder terminar de la mejor manera posible esta traumática temporada. Y ahora también buscan escaparle a la zona de abajo donde hay una gran pelea. El escenario no es tan terrible como para empezar a asustarse, pero el entrenador Frank Lampard debe encontrar resultados a fin de no sufrir.
Chelsea, al término de la jornada 34, ocupa el duodécimo puesto con apenas 39 puntos. Una campaña de 10 victorias, 9 empates y 14 derrotas, que para nada se esperaba de este equipo a estas alturas. A eso hay que sumarle que el último triunfo del equipo londinense se dio el 11 de marzo ante Leicester por 3-1. Desde entonces, acumula siete juegos sin ganar por Premier League (se le suma a las dos derrotas en Champions League ante Real Madrid).
Por el mal momento que atraviesa el equipo que lidera Lampard, se entiende que en Inglaterra aparezcan las posibilidades de descenso. Actualmente, el último en descender es Nottingham Forest con 30 puntos (misma que Leicester y Leeds, que se están salvando por diferencia de gol). Por lo cual, la diferencia es de sólo nueve unidades con cuatro fechas por jugar. Aunque, a Chelsea todavía le queda un partido más pendiente (por lo cual, tiene cinco jornadas para asegurar su permanencia).
Los resultados que podrían complicar a Chelsea con el descenso
Chelsea tiene un duro fixture por delante para el final de temporada. Sus últimos cinco partidos lo enfrentarán ante Bournemouth (viene en levantada), Nottingham Forest (rival directo), Manchester City, Manchester United y cerrará ante Newcastle (estos tres últimos, rivales que pelean arriba). Son partidos decisivos y todos muy difíciles. Y por el momento del equipo, podría no sumar victorias.
De perder los cinco partidos que tiene por delante Chelsea, los rivales directos que vienen por detrás en la tabla de posiciones: los antes mencionados Leicester, Leeds y Nottinham Forest (30 puntos) podrían complicarlo si suman 10 de 12 puntos en juego; West Ham (34); Wolverhampton (37) y Bournemouth (39) podrían superarlo con un par de victorias durante los próximos cuatro encuentros.
El descenso crecerá como amenaza si no hay buenos resultados y los de abajo empiecen a crecer en la tabla de posiciones. Pero Chelsea tiene cinco fechas por delante en donde debe dar el paso al frente, pero no para mantener la categoría, sino para demostrar que tiene con qué de cara al próximo año. Será una buena prueba de carácter para algunos futbolistas y, sobre todo, para el propio Lampard, metido en un grave problema ante las dificultades de la directiva encabezada por Todd Boehly en no sostener a un entrenador durante la campaña.
Se viene un final de temporada con mucho en juego en Inglaterra y donde Chelsea puede ser un protagonista impensado de una situación aún más remota, que asusta a aficionados, jugadores, técnicos y directivos. En la Premier League, cualquier cosa puede pasar.