Eden Hazard rescindió el contrato que tenía firmado con el Real Madrid hasta junio del 2024. El volante belga, que llegó a la capital española como un refuerzo de jerarquía, en tres años apenas alcanzó a jugar cerca del 40 por ciento de los compromisos que afrontó el primer equipo de la Casa Blanca (registró siete tantos y 12 asistencias).
De hecho, la temporada en la que menos participó fue en la reciente, en la que por cuestiones físicas Carlo Ancelotti solo pudo contar con él en nada más que 10 partidos (seis por LaLiga, tres por la UEFA Champions League y uno por la Copa del Rey). Por eso, la directiva del Merengue se inclinó por buscar una salida de común acuerdo.
Cuando se supo la noticia, medios de comunicación lanzaron que clubes de Arabia Saudita y de la Major League Soccer de los Estados Unidos se habían puesto en contacto con el círculo cercano de Eden Hazard, pues más allá de que no tuvo continuidad el último tiempo, no deja de ser un futbolista de renombre por los clubes en los que construyó su camino: Lille y Chelsea, además de la Selección de Bélgica.
Pero el destino de Hazard inesperadamente no sería ni Medio Oriente ni Norteamérica, sino nuevamente su país. Según una publicación de L’Equipe, el mediocampista retornaría a su tierra para vestir la camiseta del reciente ascendido a la primera categoría del fútbol belga, el Racing White Daring Molenbeek.
El modesto conjunto de la ciudad de Bruselas, increíblemente acabó de sellar su quinto ascenso en las últimas siete temporadas, y aunque no es el equipo que se esperaba en el ambiente para que el ex número siete del Madrid continúe su carrera, hay una atenuante que hace ver su incorporación como una acción valedera. En el Molenbeek juega de delantero Kylian Hazard, su hermano menor, por lo que tranquilamente podría hacer dupla con él en la campaña 2023/2024 de la Pro League Belga.