La noche del 23 de marzo quedará grabada en la historia del fútbol argentino. Es que luego de aquel 18 de diciembre en el Estadio Lusail, los jugadores de la Selección pudieron por fin festejar cara a cara con su público en un Monumental repleto de pasión, emoción y algarabía de un público que le rindió pleitesía a los campeones del mundo.

Y en medio de una tarde/noche que tuvo de todo, uno de los testimonios post encuentro ante Panamá que más rebote tuvo fue el de Paulo Dybala, uno de los jugadores a los que más le costó ganarse un lugar y que, entre lesiones y mucho sufrimiento, puede hoy en día lucir en su palmarés el título de campeón del mundo.

Ante los micrófonos, y con lágrimas en sus ojos, el talentoso volante de la Roma realizó una confesión que conmovió a todos. "Hace poco estaba yéndome a dormir con Oriana, hablamos y fue la primera noche que lloré pensando en mi viejo, que no había estado conmigo alzando la Copa", manifestó.

En un nuevo video en nuestro canal de YouTube, te contamos la historia entera del jugador de 29 años que ya tiene un lugar ganado en la historia grande del fútbol argentino.