Zlatan Ibrahimovic llegó a comienzos de año al Milan, su regreso al Rossoneri. Desde su vuelta, el equipo italiano había levantado en cuanto a resultados y juego: quedó por jugarse la vuelta por la Copa Italia ante Juventus en Turín, que se postergó hace ya varias semanas por el coronavirus. No obstante, podría haber ya sido todo para el mítico delantero en uno de los clubes que más cariño le tienen.

La última información es que Zlatan se iría del Milan en junio, cuando vence su contrato con el equipo. Aunque todavía resta saber qué hará FIFA con aquellos contratos que terminan a mitad de año, donde parece que todavía no habrá podido volver el fútbol en todo el mundo, la decisión del goleador ya estaría tomada. Eventualmente se baraja que los vencimientos se renueven para diciembre de 2020, pero es un detalle que todavía no está confirmado y parece que tampoco lo será en un futuro cercano.

La bomba la reportó La Gazzetta dello Sport en su portada de este miércoles: "Ibra bye bye Milan". Los tiempos estarían contados para él, que llegó esperanzado en devolverle al Milan la grandeza que tenía cuando él se fue en 2012 por veinte millones de euros. En sus pocos meses jugados en 2020, había anotado ya tres goles por la Serie A y uno por la Copa Italia, donde estaba en la semifinal en un duelo clave con la Vecchia Signora.

El sueco no comparte los ideales de la directiva ni hacía dónde van. Principalmente, su disconformidad sería con Ivan Gazidis, consejero delegado que también ha sido uno de los más criticados por los fanáticos rossoneris. Para terminar de cerrar su idea, Milan también perdería a mitad de año a Paolo Maldini, director deportivo que tiene una gran relación con el jugador, quien renunciaría a su cargo. 

El tiempo dirá si verdaderamente Zlatan decide dar un paso al costado en el Rossoneri. Además, en Italia no descartan que se retire el delantero sueco después que se normalice toda la situación de caos que estamos viviendo a causo del coronavirus. No obstante, que finalice así la carrera de uno de los delanteros más importantes de los últimos tiempos, sería una pena no solo para él, sino para todo el fútbol mundial. Esperemos que no.