En Argentina, Sergio Maravilla Martínez, verdugo de Julio César Chávez Jr, tuvo su estreno en el 2023 tras noquear en menos de 90 segundos al colombiano John Teherán. Por otro lado, a sus 48 años, el argentino quiere volver a ser tener una oportunidad mundialista.
Sin duda, el bonaerense es un recuerdo amagar para la historia del boxeo mexicano debido a que le dio una paliza jamás dada al hijo de Julio César Chávez. Es más, a partir de allí el de Sinaloa no volvió a ser el mismo peleador y comenzó a estar en un declive permanente.
Por otra parte, en los últimos tres años, Sergio Martínez volvió al ring con el objetivo de volver a ser campeón en el peso mediano. A su vez, hoy a la noche tuvo su estreno en el 2023 a sus 48 años frente al colombiano John Teherán en el histórico Luna Park de Buenos Aires.
Para el excampeón del mundo, quien estuvo dos kilos por encima de la categoría, fue un trámite la pelea debido a que con golpes largos se llevó por delante a un peleador que viajó a la capital Argentina más por el dinero que por tratar de llevar adelante una gran performance. Finalmente, Maravilla lo pudo noquear en la primera vuelta tras una serie de golpes y finalizarlo con un recto de izquierda.
Tras el combate, el argentino le habló a su público y dijo que hasta el campeonato mundial no va a parar. Además, marcó que quiso pelear ante Gennady Golovkin aunque fuera una locura y que hoy se encuentra número en el ranking AMB de los medianos y quiere que en el 2023 pelear por el Título Mundial de las 160 libras.