El pasado 8 de mayo, en el AT&T Stadium de Arlington, Saúl El Canelo Álvarez confirmó su supremacía en la división de peso súper mediano venciendo a Billy Joe Saunders por nocaut técnico en el séptimo asalto para arrebatarle el título mundial de la OMB, añadiéndolo a los cinturones de la AMB y el CMB que había conquistado ante Callum Smith.
Saunders, que para muchos era el hombre que podría frenar el impulso del mexicano, recibió muchas y muy duras críticas por no haber salido a pelear el octavo asalto. Lo cierto es que quiso hacerlo, pero su esquina se lo prohibió por las múltiples fracturas en el hueso orbital de su ojo que le provocó un golpe limpio del Canelo.
Viendo cuántas desgracias se han sucedido en el boxeo meses después, esa decisión por parte del equipo de Saunders no pudo haber sido más acertada, porque se decidió preservar la integridad física de un peleador que con esa lesión no tendría oportunidad de revertir el pleito y sí de salir gravemente dañado.
Tras llamarse a silencio durante varios meses, Saunders ha vuelto a conceder algunas entrevistas mientras se plantea si hacer o no un nuevo combate de boxeo profesional tras aquella derrota. Y fue entonces que realizó una confesión que se había guardado sobre el golpe de Canelo que lo sacó de la pelea.
“En cuanto me pegó ese golpe, pensé que me había mareado, pensé que perdía mis piernas. pero me puse a saltar durante diez segundos y mis piernas estaban bien. De pronto, la cara se me empezó a entumecer. Sentía que tenía un agujero. Mi esquina gritaba, silbaba. Yo esquivava y sentía el aire de los golpes. Fue un gran golpe. Los grandes boxeadores encuentran grandes golpes para ganar. me quito el sombrero ante Canelo”, reveló el excampeón mundial británico.