La euforia continúa en el equipo de Red Bull, pues el Campeonato conseguido por Max Verstappen, los coloca en los cuernos de la luna, no sólo por haber ganado la temporada como piloto, sino también por el sabor que otorga haberles arrebatado este trofeo al siete veces campeón, Lewis Hamilton.

Pero esta hazaña no la obtuvo Verstappen por sí solo, y el neerlandés lo sabe, por lo que no tardó en agradecer no sólo al equipo, sino en particular su coequipero, el mexicano Sergio “Checo” Pérez, quien a pesar de no poder acabar el Gran Premio de Abu Dhabi, fue pieza clave para ser la piedra en el zapato de Mercedes.

"Ya lo dije durante la carrera, pero Checo es una leyenda y lo que hizo por mí en esa última carrera para recortar la diferencia nuevamente y defender como lo hizo fue increíble, estoy seguro que sin él yo no sería campeón del mundo. Entonces, le debo mucho", señaló el volante neerlandés, quien consiguió por primera vez un título.

Y a pesar de que el originario de Guadalajara, Jalisco, no consiguió ser tercero en la temporada de Formula 1, Max asegura que hico una campaña de ensueño: "Checo ha jugado un papel clave para nosotros, especialmente en la segunda mitad del año, él ha sido un fenomenal servidor del equipo en el apoyo a mi como su compañero".